Complejo de Beta Glucanos más Vitaminas D3, C, Selenio y Zinc

Los betaglucanos o Beta-glucanos son un tipo de fibra muy beneficiosa que se encuentra en algunos vegetales y contribuyen a mantener los niveles normales de colesterol sanguíneo.

Podemos encontrar los betaglucanos en alimentos como la avena, cebada o el maíz, y el consumo de ellos a procedentes de esta fuente contribuye a reducir la subida de glucosa en sangre después de comer. También los encontramos en forma de suplementos, constituyendo la alternativa idónea para aprovecharnos de sus beneficios sin modificar nuestra dieta.

Los betaglucanos son un grupo heterogéneo de polisacáridos naturales, que consisten en monómeros de D-glucosa unidas por un enlace glucósido β. Son importantes elementos estructurales de la pared celular cuyo principal beneficio para el organismo es como apoyo al sistema inmunológico. Y es que, el sistema inmunológico es una red de células, tejidos y órganos que trabajan juntos para proteger contra gérmenes y microorganismos.

Los Beta-glucanos son uno de los principos activos de numerosos hongos y setas como el reishi, shiitake o maitake.

Actualmente, son ampliamente recomendados por los profesionales en esta área particular de la salud los beta glucanos 1,3 / 1,6, que son polisacáridos de origen natural derivados de la pared celular del Sacchromyces Cerevisiae.

Las diferencias entre los enlaces de betaglucano y su estructura química, en relación a la solubilidad, el modo de acción y la actividad biológica en general, son muy importantes.

Las investigaciones han demostrado que los betaglucanos insolubles 1,3/1,6, tienen mayor actividad biológica que sus homólogos betaglucanos solubles 1,3/1,4. Es importante para la estimulación inmune que las cadenas de betaglucano contengan gran cantidad de enlaces 1,3/1,6. Otros enlaces pueden solamente contribuir al contenido de fibra.

La fórmula Complejo de Beta Glucanos de LAMBERTS® añade en su composición importantes nutrientes sinérgicos tales como la vitamina D3, la vitamina C, más los minerales selenio y zinc, todos ellos reconocidos por su contribución al sistema inmune, protección al organismo del daño oxidativo y colaboración en el proceso de división celular.